Las actividades extraescolares son aquellas que los niños toman en sus momentos de ocio, como una forma de cultivar otras habilidades, aprender cosas nuevas, hacer ejercicio o simplemente pasar un buen rato. Siempre se utilizan en horarios no lectivos, y en muchas ocasiones sirven como una herramienta útil para aquellos padres ocupados que necesitan de un lugar propicio donde dejar a sus hijos mientras cumplen con sus labores.

Ahora, si recién estamos pensando en anotar a nuestro hijo en una actividad extraescolar, llega el momento de decidir qué actividad extraescolar vamos a elegir para el niño. Por supuesto que hay algunos factores que consideraremos antes de hacerlo, y jamás será por imposición.

¿Cómo elijo las actividades extraescolares para mi hijo?

El principal factor a considerar cuando nos toca decidir dónde irá nuestro hijo a pasar sus ratos libres, es tener en cuenta la opinión de él o ella antes de elegir. Jamás debemos imponerle a nuestros hijos ninguna actividad que no quieran hacer, en definitiva tiene que resultar como algo divertido y para distenderse de su vida lectiva, no como otra presión que agregar a su vida en su corta edad. Como primer fundamento, debe existir un interés del niño en practicar la actividad, y jamás lo obligaremos a practicarla si no quiere. Muchos cometen el error de elegir estas actividades en función del horario que más comodo le queda a los padres.

Estamos hablando siempre de niños, y está más que claro que ninguno de ellos está preparado para vivir la rutina que podemos estar viviendo los adultos. No podemos, ni debemos, abusar de estas actividades y convertir la vida del niño en un infierno lleno de actividades y una agenda abultada. Siempre tendremos en cuenta su opinión, y dejaremos que el niño elija una actividad y la haga por placer y diversión, y no por otra cosa.

Finalmente, volvemos a hacer hincapié en lo mismo. La actividad extraescolar no debe significar una sobrecarga para el niño. Psicologicamente, no sería bueno que se viera envuelto en una actividad que le quita todo el tiempo libre. Un niño debe tener siempre tiempo libre para dedicarle a la escuela, y para jugar y tener una vida normal y saludable.