Un elemento importante que muchos tutores y padres quieren es poder hacer una animación a la lectura a los niños, ya sean hijos, sobrinos o nietos, entre otros. Esto puede parecer difícil para muchos, aunque la verdad es que existen formas para incentivar a los niños a leer y hacer de esto un hábito.
Dificultades para animar a un niño a leer
Existen algunas dificultades que sufren los adultos para animar a un niño a leer. La primera es la energía del niño, a esa edad por lo general la energía está a tope, lo que los lleva a siempre estar activo, corriendo y jugando. Esto hace que una actividad como leer sea bastante complicada de incentivar.
Otra dificultad que puedes enfrentarte es a la facilidad de distracción. Los niños se desconcentran con facilidad por todas las interacciones con el exterior. Por ello pueden interrumpir la lectura a los 5 minutos de haberla iniciado. Incluso puede pasar que no toque el libro en todo el día ni en toda la semana.
La dificultad más apremiante son la televisión y consolas de videojuegos. Esto debido a que en ambos medios estos se distraen viendo programas que son de su interés y les gustan. Esto conlleva a que estos aparatos tendrán toda su atención en vez del libro y podría provocar que el niño no agarre el gusto por la lectura.
Técnicas para hacer la animación a la lectura de niños
Existen técnicas para poder hacer la animación a la lectura a los jóvenes y que estos se incentiven al hacerlo. Lo primero que debes de saber es que no puedes obligarlos, así que nunca se los impongan, porque lo harán de mala gana. Lo segundo que se debe entender es que tu eres su ejemplo y por ende si quieres que lean tu deberás hacerlo y mostrar ánimos positivos hacia los libros y lectura.
Para animar a los niños a leer, lo primero que debes hacer es leerles libros que sean interesantes. El verte leer y disfrutar la lectura a corta edad les incentivará y enseñará ese hábito, aprovechando la cualidad de los niños a copiar todo. Puedes hacer esto a hora de la tarde noche, cuando ellos hayan terminado de jugar y tengan la energía no tan elevada.
Otra técnica es crear eventos o actividades de lecturas que sean entretenidos para los jóvenes. Puedes plantearlo como un juego o aventura o que conocerán las grandes aventuras de un personaje o cosas así. Ten en cuenta que siempre debes cumplir con la actividad, así que en esta parte la elección del libro es crucial.
Ten presente también que los libros no deben ser complicados si se trata de niños. Leer novelas como las de Edgar Alan Poe, Homero o Gabriel García Márquez no es buena idea. No porque los libros no sean interesantes, sin embargo a esa edad, pueden no entender gran parte del contenido, lo que les causa fastidio.
Puedes utilizar libros que sean cortos y que sean inmersivos, por ejemplo Harry Potter (Los primeros libros). Las fábulas de Esopo, las cuales son divertidas y los niños pueden aprender de las mismas y dar ideas al respecto.
Tiempo para que un niño se anime a leer
Algo que debes de considerar es el tiempo al que vas a incentivar a los niños a leer. Si están jugando con otros niños, es poco probable que se animen, ya que su concentración total está justamente en el juego. Sin embargo, puedes aprovechar cuando dejen de jugar para animarlos a todos a un nuevo juego o aventura.
Al iniciar el día también es un buen momento para leer, puedes leerles un libro y provocar que lo lean contigo. Si lo haces todos los días verás que él agarrará el libro primero que tú y poco a poco cogerá el hábito de la lectura. Puedes aplicar este principio, antes de dormir, aplicando el principio de leer un cuento, por ejemplo.
Otro momento que se puede aprovechar para incentivarlo a leer es después de las comidas, sobre todo el almuerzo. Al terminar de leer puedes decirle que si se quiere divertir, mientras reposa la comida. Es seguro que te diga que sí y plantéale que es un juego que disfrutará mientras espera para ir a jugar.
Qué cosas no se deben hacer si se quiere animar a un niño a leer
Existen ciertas acciones para animar al niño a leer, ya sea de manera consciente o inconsciente que hacen que un joven pierda el interés en la lectura.
La primera es que no ve a sus padres o profesores leyendo. Si el niño ve que tu no lees, sino que ves televisión solamente, no esperes que él, sí lea, ya que no das ejemplo.
La segunda cosa que no debes hacer es hacerlo de manera forzada. Muchos utilizan reglas, como que debes de leer por media hora y hacen que el niño haga esta actividad obligatoriamente. Esto causa todo menos agrado al infante, el cual creará aversión a la actividad y a la primera oportunidad la dejará .
Por último no muestres nunca una actitud pasiva ante el niño al incentivarlo a leer. Muchos al intentar hacer una animación a la lectura a jóvenes, lo hacen de forma pasiva. Es decir, no les muestran lo que disfrutarán al leer el libro, por tanto el niño no se emociona y es poco probable que lo haga. Recuerda que los niños responden a la emoción.
Recomendaciones finales
Existen algunos aspectos que debes considerar del joven y son los gustos que tienen los mismos. Pueden haber libros genéricos que les gusten a todos los niños, pero hay otros que pueden tener efecto de atracción al joven, pero también de repulsión. Siempre está atento a cómo reacciona un joven al libro, ya que puede que esté leyendo un libro que no quiera leer. Para investigar sus gustos puedes colocar varios tipos de libros y consultarle qué libro quiere leer. Es probable que te pregunte sobre qué trata cada uno, dale una breve reseña y que él elija cual leerá
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